Formación – Solidaridad Internacional › Foros › El laberinto de los Derechos Humanos y la igualdad para las mujeres en África – III Edición › Módulo 5 › Respuesta a: Módulo 5
Hola otra vez,
Quisiera responder a las otras dos preguntas planteadas en el foro. La primera la relacionada con el arte. Yo creo que el arte como forma de expresar la realidad ha sido, es y será una necesidad esencial del ser humano. La expresión artística traduce aspectos de la realidad, ideas, sentimientos, emociones, ofrece una visión subjetiva del entorno y ayuda a transformarlo. Cualquiera que sea la manifestación elegida, la característica central del arte es que es un lenguaje universal, de ahí su poder de comunicación. Esta es la principal razón por la que se utiliza como herramienta de reivindicación y denuncia, de transmisión de valores con intención transformadora valiéndose de su valor estético y contemplativo. El arte como forma de cuestionar lo normativo, los discursos hegemónicos visibilizando otras experiencias, otros relatos es un acto político para hacer valer derechos y demandas elegido por colectivos excluidos y oprimidos. Los artistas propuestos en el foro son un ejemplo claro de personas activistas críticos de un colectivo oprimido. Me he encontrado con este aforismo que creo que describe muy bien lo que el activismo social hace desde el arte, “El arte no es un espejo para reflejar el mundo, sino un martillo con el que golpearlo” Vladimir Maiakovski
Respecto a la pregunta sobre violencias directas, simbólicas y estructurales mencionar la trata de mujeres y niñas con fines de explotación sexual, que creo no se ha mencionado en los apuntes. La trata afecta sobre todo a víctimas del África subsahariana junto a mujeres de Asia.
Por otro lado, la prostitución también la entiendo como violencia sexual. Es una consecuencia de la violencia estructural que sufren las mujeres no sólo en África sino en todo el mundo. Por último también me gustaría añadir que tengo la sensación de que cuando hablamos de DDRS los Derechos Sexuales tienen menos reconocimiento que los Derechos Reproductivos. Prácticamente se habla de planificación familiar, de salud materna, de contracepción, de aborto, restando importancia a las prácticas sexuales no reproductivas, a la libertad de las mujeres de ejercer control sobre el propio cuerpo sobre su sexualidad y sobre la gestión del placer.