Buenas tardes,
Creo que los casos expuestos son el resultado de un trabajo continuado por parte de la organización. Sin duda existe un interés en que la interculturalidad se haga efectiva por las instituciones europeas, pero esto choca con muchas realidades de territorios gobernados por fuerzas políticas de derecha o extrema derecha. Estas no solo recortan en políticas públicas y de educación sino que también desde las instituciones mandan mensajes de odio y racistas.
Otra cuestión que creo que cabe resaltar es que en las ocasiones en la que los talleres se destinan a la población en general solo se acercan las personas ya sensibilizadas. Sin duda, desde la educación formal se tiene una vía óptima para estos temas; sin embargo el problema creo que recae en que el profesorado no es consciente de estos hechos, ni de sus privilegios y de nuevo se pasa por la voluntad y la sensibilización previa para educar en estas cuestiones.