Buenas noches a todos y todas.
Una vez más, pensando la coyuntura electoral en el Mundo Islámico y el viraje del ultraconservadurismo, los invito a todos y todas a seguir de cerca lo que viene sucediendo, el estallido social ocurrido en Turquía por el retiro de Erdogán del Convenio de Estambul, coloca en jaque los derechos de las mujeres, una vez más. Esta situación no se puede pasar por alto cuando estamos pensando y reflexionando sobre los derechos de las mujeres refugiadas en el Líbano.
Les dejaré aquí dos Links sobre el retiro de Erdogán. Pensar esta problemática en una perspectiva regional-global, permité ver de forma conjunta y estructural la represión de las mujeres.
https://www.amnesty.org/es/latest/news/2021/05/turkey-women-across-the-world-demand-reversal-of-decision-to-quit-genderbased-violence-treaty/
Respondiendo a la pregunta planteada por Jorge, creo que priorizaría la participación política y social de las mujeres en la sociedad, de manera que la contratación de mujeres sea una exigencia en todos los ámbitos, la participación de la mujer como sujeto, es lo único que permite la construcción de una sociedad hecha para y por mujeres. A mí me sigue pareciendo un absurdo hablar de sensibilización y pedagogía, es casí como tener que disculparse por ser mujeres. De charla en charla con talleres dónde se nos sigue menospreciando por ser mujeres no se logra nada, las mujeres no somos sujetos pasivos, y hasta que no se nos quite esa etiqueta no se nos tomara en serio. El resquebrajamiento del conservadurismo ha llegado a un punto sin precedentes, las mujeres turcas se están tomando las calles y están alzando la voz, de eso se trata, de hacer presencia política y social desde el escenario público. Hay que dejar de pensar a las mujeres en el espacio privado únicamente, se trata de tomar el espacio público y reivincidcarlo nuestro.
Un saludo,
Andrea Peñaloza