Respuesta a: Foro del Módulo 1

#3668
kathellymaria
Moderador

Creo que los derechos humanos están en un proceso evolutivo constante. Estoy estudiando y preparando algunos trabajos sobre el uso de la violencia sexual contra la mujer como arma de guerra. El abuso sexual contra las mujeres en tiempos de guerra ha sido visto durante mucho tiempo como situaciones aleatorias y naturales. Fueron considerados, por lo tanto, eventos que no estaban directamente relacionados con los conflictos. Por esta razón, se ha utilizado durante siglos como un arma barata y un instrumento eficaz de guerra. Sólo con la ocurrencia de atrocidades sexuales masivas ocurridas en Bosnia y Ruanda, la violación y otros métodos de violencia sexual fueron finalmente reconocidos como un arma de guerra. Como resultado, las normas para el reconocimiento y protección de mujeres y niños durante situaciones de conflicto armado comenzaron a emerger con mayor eficacia. Por supuesto, antes de lo sucedido en Bosnia y Ruanda, ya existían tratados para proteger la violencia contra la mujer, pero dado que el cuerpo de la mujer se utiliza como estrategia de guerra, es necesario adecuar algunas acciones afirmativas por parte del Estado para prevenir este tipo de violaciones.

En cuanto a la propuesta universal de derechos humanos, tuve la oportunidad de leer, durante la maestría, el libro de Carlos Nino “Ética y Derechos Humanos” que incluso figura como bibliografía del módulo 1. En resumen, Nino habla de la teoría denominada constructivismo ético y que sería posible identificar tres derechos básicos: autonomía de la persona, inviolabilidad de la persona y dignidad de la persona. Todos los otros derechos humanos necesitan ser vistos con una mirada relativista que dependen de factores culturales e históricos. De esa forma, los derechos humanos no son una creación puramente eurocéntrica que las naciones liberales pretenden imponer a otras culturas porque el derecho básico de autonomía limita esa actuación.

Además, creo que la evolución de los tratados y la participación de las mujeres en la lucha y la toma de decisiones está siendo un paso importante para garantizar derechos ya reconocidos. Por supuesto, todavía no es un escenario ideal y perfecto, pero es un proceso importante.