Formación – Solidaridad Internacional › Foros › El laberinto de los Derechos Humanos y la igualdad para las mujeres en África – III Edición › Módulo 2 › Respuesta a: Módulo 2
Buenas noches,
En mi caso, mi experiencia de trabajo y voluntaria en países africanos es muy reciente, apenas año y medio, y sólo he ido de visita, no he vivido allí, por lo que no he podido observar personalmente avances o retrocesos en los derechos de las mujeres de los países de intervención (Kenia y Camerún). No obstante, voy a comentar algunos aspectos de los proyectos en los que trabajo actualmente en Kenia, en diseño y seguimiento (la gestión la lleva personal local) que creo que están contribuyendo o pueden contribuir a avances, en la práctica, en los derechos de niñas y mujeres de nuestras zonas de trabajo.
El eje central de la actividad de la ONG en la que trabajo actualmente es la lucha contra la mutilación genital femenina (MGF) y otras prácticas relacionadas en Kenia a través de campañas de sensibilización; a partir de ahí, se amplían las actuaciones a otros sectores como la educación (acceso permanencia de las niñas a la educación, infraestructura y equipamiento escolar y capacitación de profesorado), acogida de niñas en situación de riesgo en casas o dormitorios o concesión microcréditos productivos para mujeres.
Me centro en las campañas anuales, que creo que interesan más en el contexto de este módulo. El trabajo se hace con el apoyo de escuelas de primaria y secundaria a las que, a cambio de participar en las campañas y comprometerse en la lucha contra la MGF, se les apoya con otro tipo de recursos. Allí se crean grupos de alumnas (recientemente han comenzado a acudir niños) que son informadas y formadas respecto a sus derechos y cómo prácticas como la MGF o el matrimonio forzado infantil, tradiciones culturales muy arraigadas en algunas zonas, vulneran estos derechos; también se trabajan capacidades, como saber argumentar, debatir, etc. Con el apoyo de docentes voluntarios/as, estas niñas, una vez formadas y tras haber adquirido herramientas para ello, se convierten en las protagonistas de la campaña anual; son ellas quienes exigen sus derechos a través de distintas formas de representación (teatro, canciones, bailes, poemas, escritos, etc.) usuales en sus entornos y que se dirigen tanto a sus familias como al resto de la comunidad local, con especial atención a los líderes tradicionales.
Se propone un trabajo bajo el enfoque de derechos, puesto que se plantea la intervención en base a los derechos de las niñas y adolescentes, trabajando tanto con ellas como con sus familias y comunidades (sujetos de responsabilidades) y las autoridades – a nivel local – sujetos de obligaciones. Lo que intentamos es, en línea con las luchas feministas, como vemos en el material del módulo, pasar “de un discurso de las necesidades a las reivindicaciones de los derechos” en el que “las mujeres [niñas y adolescentes en este caso] dejan de ser percibidas como víctimas pasivas (…) y se convierten en ciudadanas con plenos derechos, para reivindicar al Estado que cumpla con sus deberes.”
De forma paralela a las actividades que estas niñas realizan, la organización tiene un contacto continuo con las familias, a las que también se va informando y sensibilizando en materia de derechos de las niñas y se articula un trabajo en red con autoridades locales para mejorar protocolos de detección de niñas en riesgo, derivación y protección (Oficina del menor, autoridades de seguridad local, personal sanitario, etc.).
Pese a que la MGF está prohibida por ley en Kenia y hay distintos planes y programas regionales, nacionales e internacionales que establecen medidas para erradicar dicha práctica, hay tribus que la siguen practicando, sobre todo en zonas rurales, asociada a otras costumbres como la dote y el matrimonio infantil forzoso. Es por ello, y conscientes de que los cambios culturales son lentos y complejos, se articula un trabajo con familias, comunidades locales (incluidos los líderes locales que toman decisiones basadas en el derecho consuetudinario) y las autoridades. Creo que, en este caso, podemos considerar que se han conseguido avances legislativos pero que, como se comenta en el material del módulo, en la práctica queda todavía mucho por hacer, y eso que Kenia no es de los países con mayor incidencia de MGF.
Saludos,
María