Formación – Solidaridad Internacional › Foros › El laberinto de los Derechos Humanos y la igualdad para las mujeres en África – III Edición › Módulo 6 › Respuesta a: Módulo 6
Hola a todas,
La verdad es que las preguntas son intensas, siento que me quede una intervención tan larga…De todos modos, gracias a las intervenciones en el foro anteriores, que han ido rompiendo el hielo con sus aportaciones hasta ahora, sin duda me ha ayudado a poder dar respuesta a las preguntas planteadas. Por otro lado, reflexionando sobre las preguntas, no he podido evitar acordarme de los ejemplos que he visto en Etiopía, Uganda, Kenya y Guinea.
Sobre los factores y causas que determinan el nacimiento de movimientos locales en África en la lucha por el medio ambiente, los métodos reivindicativos pueden ser válidos para transformar el deterioro socioambiental, Silvia Tlvr, decía que a la hambruna, las guerras y la búsqueda de mejores oportunidades y condiciones de vida, se unía ahora el problema del cambio climático. En verdad el problema del cambio climático o de cualquier inclemencia medio ambiental es causa de migración antes que las guerras o la pobreza. De hecho, es causante en muchos casos, junto con la inactividad por parte de los gobiernos africanos de establecer medidas para prevenirlo, de muchos de los retos de este continente. Un ejemplo de lo que digo son las hambrunas de Etiopía. Son causa directa de la falta de lluvias, agravadas con la acción del calentamiento global (como la de 2015, resultado del efecto del “El niño”). La agricultura está tan poco desarrollada y apoyada, especialmente la agricultura de subsistencia de las familias, que la falta de lluvias puede resultar muy grave. Siguiendo con el ejemplo de Etiopía, la inversión en los campos de teff (grano con el que se hace la enjera, alimento base en Etiopía) por parte del gobierno era notable (tractores, sistemas de riego y maquinaria de recolección, así como infraestructuras de almacenaje) pero sólo en aquellos campos destinados a la exportación internacional, haciendo evidente el contraste brutal con los campos de la población local que aún trabaja la tierra a mano y con animales de tiro. Esta desigualdad solo se agrava con las inclemencias medioambientales. Y eso que no he citado las plagas, como la de langostas que recorrió el año pasado (que ha continuado durante este) en el cuerno y parte del norte de África.
En definitiva, opino que la creación de movimientos locales, la extrapolación de otras medidas, etc, debería estar apoyada, aunque fuera mínimamente por los gobiernos de cada país en primer lugar o ser de su interés al menos, como ya se ha hecho en otros países (Kenya desde hace unos años tiene prohibida la entrada, uso y fabricación de bolsas de plástico). El problema ya es demasiado grande como para afrontarlo únicamente desde las comunidades afectadas. La reivindicación debería de estar más representada en las medidas de los gobiernos para que realmente tengan la fuerza y sean válidos para transformar el deterioro socioambiental.