Respuesta a: Foro del Módulo 3

#3864
vanessasanchezmaldonado2
Moderador

Buenos días,

Gracias por vuestras aportaciones, sin duda van en la línea de las dadas por el resto de compañerxs hasta el momento. Os voy respondiendo y lanzando preguntas.

Como bien señaláis, y ya hemos abordado en el foro, la visión de las mujeres africanas es resultado de la construcción que se ha hecho de ellas históricamente.
Fito, leyendo tu intervención no me queda claro si consideras que existe “un descuido de la vida” y ausencia de derechos humanos, ¿me lo aclaras porfa?
Y sobre el proceso de evangelización en el continente, me atrevería a decir que en América Latina existe desde antes y en nuestro contexto también se da. Y no considero que aparezca como respuesta a “una vida desordenada”, sino más bien que la religión (cuando determina la vida) se nutre de la desesperanza… como decía Marx “es el opio del pueblo”. En Angola, contexto en el que he vivido y trabajado, me sorprendía como las iglesias evangélicas (que son diversas y muchas) determinaban la forma de pensar y estar de las personas de una manera impactante y como para muchas personas suponía un bálsamo para afrontar el día a día.
Me gustaría remarcar que cuando pensemos en las tradiciones seamos cuidadosxs, pues hay tradiciones que nos positivas y llenas de valores comunitarios. Obviamente hay muchas que atentan contra los derechos humanos y estas son formas de opresión que configuran como “tradición” para validar formas de control y opresión hacia ciertos colectivos. La cultura no es algo estático, cambia a cada momento.
Rosa, es muy pertinente la idea de “descolonizar la mente” para deconstruir el “imaginario colectivo” que como señala Maite, está construido desde la mirada colonial. Para ello coincido con Tania en que los feminismos desde los márgenes, disidentes, periféricos o como yo los denominé en mi tesis doctoral “feminismos contra corrientes”, es decir feminismo negro, feminismo comunitario, feminismos caribeños e indígenas, feminismo decolonial, etc, resultan esenciales para tal deconstrucción. Pero esta deconstrucción considero que ha de tener un doble camino, no podemos pedir que desde el “sur global” deconstruyan y construyan discurso si desde le “norte” no realizamos un camino de revisión de privilegios y deconstrucción de nuestro propio imaginario. De esta manera cualquier propusta de “desarrollo” estará basada en parámetros de equidad (más allá de la igualdad) y colaboración desde ambas partes. También considero que hemos de repensar qué es el desarrollo.

Por otra parte, os pediría a quiénes no habéis participado aún que vayáis más allá de la primera pregunta que os lancé. Ya he propuesto otras para seguir avanzando, si leéis las aportaciones de los y las compañeras nos nutrimos más, así que os pido a todxs que vayáis respondiendo, que lancéis preguntas.

También os comento que hablando con Solidaridad Internacional, hemos acordado ampliar un par de día más el módulo para poder acabarlo.

Un abrazo,

Vanessa