Formación – Solidaridad Internacional › Foros › El laberinto de los Derechos Humanos y la igualdad para las mujeres en África – IV Edición › Foro del Módulo 4 › Respuesta a: Foro del Módulo 4
Los modelos económicos y de desarrollo deben dinamizarse, ya que estos se entretejen, con una integralidad exigente y cambiante, no hay modelos de desarrollo efectivos , únicos, las realidades locales y la naturaleza , condición y posición de las regiones y poblaciones, es determinante. En la cultura africana, como en otras , el dinero aparece claramente sexuado, de muy distintas maneras se adscribe al varón. Es asociado a potencia y virilidad. Aunque hay muchos avances estructurales, y socio feministas, en base al empoderamiento como estrategia de desarrollo, Todavía son minoritarias las mujeres que exploran las áreas de lo que constituye hoy el verdadero poder económico. El desafío continúa siendo el mismo, de hace décadas, en esta región más que en otras, generar una acción transformadora no solo de empoderamiento, sino también de cambio social.
El empoderamiento es sólo hasta ahora, una de las estrategias, motivantes y reconocidas en la mayoría de las regiones para lograr la igualdad, promoviendo condiciones y acciones para que las mujeres, gocen de mayor poder y control desde distintas dimensiones , a) que logren ganar poder personal, poder interior, la toma de conciencia sobre la titularidad de sus derechos , así mismo, ganar poder colectivo, agencia de su vida económica y social. Acción colectiva en la esfera productiva y de desarrollo.
Es también un hecho que el contexto cambiante altera la dinámica de desarrollo en la vida de las mujeres y las condiciona, fue interesante acá reflexionar en la alteración más reciente , por mencionar una. La pandemia de Covid- 19. No es casual el detalle del informe de Desarrollo Humano (PNUD 2020), resumiendo que la COVID-19 ha tenido impactado sobre las mujeres, aumentando todavía más las desigualdades sociales, como principales cuidadoras, dentro del ámbito económico de trabajos no remunerados y no reconocidos. La sobrecarga de trabajo reproductivo, de cuidados y presión sobre la sostenibilidad alimentaria. A esto se suma la practica de trabajo formal propia de la mujer africana, muchas veces como única alternativa y en los empleos formales, la disparidad salarial.
Cuestionar la posición y condición y posición de las mujeres de África en el contexto de la contribución al desarrollo, pasa por la buena practica de los derechos humanos de las mujeres, la reivindicación de los mismos como garantía de desarrollo permitirá dignificar la vida de las mujeres, transformar su condición actual y futura y posicionarla en esferas económicas sociales y de desarrollo, fortaleciendo sus capacidades y habilidades para la vida, la resiliencia misma debe ser cuestionable, son la s mujeres las que en África no solo asumen los roles productivos desiguales , sino también la carga reproductiva y de cuidado, que sustenta un sistema de oportunidades desfavorables para el avance de las mujeres en autonomía y agencia para su propio desarrollo en función de ella misma, de su esencia.
Como mencionaba en mi comentario anterior , la emancipación de la mujer tiene demasiadas aristas y todas deben ser cuestionables, va más allá de la esfera económica.